La temporada 2014-2015 de la NBA fue una de las peores en la historia de la franquicia de los Knicks de New York. Terminaron con récord de 17-65, últimos en la Conferencia del Este y se presentaban al draft de 2015 con la esperanza de seleccionar a su salvador.
Les tocó seleccionar en cuarto lugar y las expectativas eran altas, su fanaticada no aguantaría otra equivocación de parte de la gerencia del equipo. Ese año los Timberwolves de Minnesota escogieron primeros y se hicieron de los servicios del dominicano Karl Anthony-Towns.
Le siguieron los Lakers y 76ers, quienes escogieron a D’Angelo Russell y Jahill Okafor, respectivamente. Llegó el momento que esperaban los Knicks y la fanaticada esperaba que seleccionaran a un jugador capaz de cambiar el rumbo de la gloriosa franquicia. Un joven de 20 años, proveniente de Latvia causó gran interés en los escuchas de la NBA.
Sin embargo, muchos pensaban que era un experimento y que quizás no tenía lo que se necesita para triunfar en el mejor baloncesto del mundo. Los Knicks no lo dudaron y seleccionaron a Kristaps Porzingis en el turno #4 de la primera ronda.
Porzingis era un jugador espigado, pero muy flaco para su posición. Un jugador de 7’3″ de estatura, capaz de anotar el triple, anotar a media distancia y atacar el canasto del dribleo. Estas características peculiares en la NBA le ganaron el apodo de “El Unicornio”.
En su primer año Porzingis dió muestra de que tendría un futuro brillante en la NBA. Culminó su año de novato promediando 14.3 puntos por juego, 7.3 rebotes y 1.9 tapones por partido. Su destacada actuación le valió ser nombrado al equipo “All Rookie”, galardón otorgado a los mejores novatos de la temporada.
El futuro se convierte en presente
Esta temporada los Knicks entraron sin muchas expectativas. Lo más comentado en la temporada muerta fue la salida de Phil Jackson de la franquicia y la contratación de Tim Hardaway Jr. con un contrato de cuatro años y 71 millones. Pero, todos esperaban ver cómo sería el desarrollo del “Unicornio” entrando a su tercera campaña en la NBA. Con solo 22 años y un futuro brillante en la NBA, Porzingis se ha convertido en el mejor jugador de los Knicks y uno de los mejores anotadores de la liga.
Actualmente, promedia 27.0 puntos,7.2 rebotes y 2.2 bloqueos por partido, al tiempo que lidera a los Knicks a un comienzo de temporada de 10 ganados y 10 perdidos. Porzingis anotó 30 puntos o más en ocho de los primeros 12 compromisos de su equipo.
Próximo Dirk Nowitzki
Uno de los mejores, sino el mejor, jugador internacional en la historia de la NBA está a punto de retirarse. Se trata de Dirk Nowitzki, máxima estrella de los Dallas Mavericks por las pasadas dos décadas y uno de los mejores tiradores en la historia del deporte.
Nowitzki revolucionó la liga por ser un jugador de siete pies capaz de anotar desde todos los ángulos de la cancha. Si lo defendía un jugador más pequeño, lo llevaba al poste y le anotaba con facilidad tirando sobre su defensor. Si lo defendía un hombre grande, lo dominaba poniendo el balón en el piso para crear su tiro. Sin dudas uno de los jugadores más difíciles de defender en los últimos años.
Porzingis es una versión muy parecida a Nowitzki, con la diferencia que es tres pulgadas más alto y pone con mayor efectividad el balón en el suelo para atacar. El futuro es brillante para este joven jugador de los Knicks. Debe fortalecer su físico y mejorar su juego uno vs uno para poder alcanzar al maestro Nowitzki. Su altura y tiro son sus mejores armas y “El Unicornio” sabe explotarlas a perfección. Los Knicks se sacaron la lotería en el draft de 2015, cuentan con un jugador especial que puede devolver el brillo a la Gran Manzana.
La gerencia de los Knicks debe buscar una estrella y varias piezas de calidad para crear un equipo alrededor de Porzingis. Esta temporada no será el año, pero con Porzingis en New York, los Knicks estarán de vuelta.
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