El segundo mejor prospecto de las Grandes Ligas y juega para los Padres de San Diego. Su reputación de futura estrella en Las Mayores es tan fuerte, que Manny Machado aceptó moverse a la tercera base cuando firmó con el equipo. Tatis lo tiene todo y es comparado, precisamente, con el propio Machado. Una defensa elite, batea para buen promedio y contacto y posee poder.
La temporada pasada, con tan solo 18 años, Tatis lució en Clase A con promedio de .281 y estableció una marca para el equipo de Fort Wayne con 21 jonrones. Luego fue subido a Doble A con el equipo de Sn Antonio, donde jugó muy bien a pesar de ser uno de los jugadores más jóvenes de la liga.
Tatis fue seleccionado #1 en el Draft de la Liga de Invierno de República Dominicana por las Estrellas Orientales. Participó en la la liga, logrando promedio de .246.
Todo esto sucedió en un período corto de tiempo y Tatis recibió la oportunidad de batear frente a lanzadores de Grandes Ligas al ser invitado a los campos de entrenamiento de los Padres de San Diego.
En 16 partidos, mantiene promedio de .262, dos jonrones y cuatro carreras remolcadas. Sus habilidades no dejan de impresionar a la gerencia de los Padres, pero todavía no está claro si Tatis hará su debut en Las Mayores este año. Pero, la realidad es que se espera que el dominicano comience a aportar al equipo grande en 2019. Los Padres cuentan con la mejor finca de talentos de las Grandes Ligas y tienen un futuro extraordinario con las firmas de los pasados años que incluyen a Eric Hosmer y Manny Machado.
El reporte de scout de Tatis lo coloca jugando en la tercera base a largo plazo, en especial por su estatura de 6’3”. Además, menciona que es un bateador de impacto, con la oportunidad de convertirse en un Guante de Oro en defensa. Menciona que tiene la habilidad para ser seleccionado a varios Juegos de Estrellas. Sus instintos defensivos son buenos y su poder lo convierte en una amenaza en el medio de la alineación. Debe mejorar el reconocimiento de lanzamientos, para que sea más efectivo en el plato y pueda mantener un mejor promedio de bateo. Eso lo llevará al próximo nivel y a convertirse en una estrella de Grandes Ligas.