El viernes en la noche el #TeamSportology estuvo presente en el American Airlines Arena, hogar del Heat de Miami, para presenciar el último partido de pre-temporada entre el Heat y los Rockets de Houston. Fuimos testigos de como la dupla de James Harden y Russell Westbrook se complementa, dentro y fuera de la cancha. Y tenemos que confesar, su química fuera de cancha es mucho mejor que dentro de la duela. Los dos MVP son buenos amigos y en el camerino se la pasan juntos, disfrutando cada momento, pero en cancha, aún se ve a un Westbrook incómodo, sin encontrar su lugar.

Lucen mejor sin Westbrook

Los Rockets dominaron 144-133 al Heat, apoyados en 44 puntos de James Harden. La ofensiva de Harden luce imparable y hasta en juegos de pre-temporada sale a la cancha a dominar. Su habilidad de anotar el balón es extraordinaria y anotar 40 puntos ya es algo rutinario para el ex-MVP. Sin embargo, cuando Westbrook estuvo en cancha, se notaba que Harden estaba haciendo un esfuerzo genuino para involucrar a su compañero.

Russell Westbrook calienta previo al encuentro con el Heat en Miami.
Foto:Sportyology

Sin embargo, el esfuerzo no estaba dando resultados, pues Westbrook continúa muy ineficiente con su tiro a media y larga distancia. Los contrincantes lo saben y cierran la pintura para evitar su ataque. A eso hay que añadirle que Westbrook ha perdido algo de su habitual explosividad y eso afecta su habilidad de terminar jugadas cerca del canasto. Además, está jugando con vario dedos dislocados, lo que sigue afectando su rendimiento.

El equipo de Houston lució a las mil maravillas cuando Westbrook estaba fuera de juego. La fluidez ofensiva era evidente con su núcleo de jugadores que lleva años jugando juntos. Clint Capela, PJ Tucker y Eric Gordon se conocen y complementan muy bien con Harden y la ofensiva corre muy bien.

Será un proceso todo el año

Los Rockets tienen el talento para ganar muchos juegos de temporada regular y pelear en a postemporada de la Conferencia del Oeste. En la temporada 2017-18 lograron la mejor marca de la NBA, ganando 65 juegos y el año pasado fueron el cuarto equipo del Oeste con 53 victorias. El talento lo tienen y ahora añaden a uno de los jugadores más talentosos de la liga en Westbrook. Sin embargo, el añadir una pieza tan importante a un equipo toma tiempo. Los Rockets pasarán por un largo proceso, en donde su dirigente Mike D’Antoni, debe buscar la manera de colocarlos en situaciones que se sientan cómodos y puedan producir a su máximo nivel.

El detalle está en que ambos son jugadores que dominan el balón y no son muy efectivos cuando no están en control ofensivo. De hecho, estos dos jugadores han tenido números históricos en la categoría de ‘usage percentage’, estadística que mide el porciento de las jugadas en que están involucrados. Harden y Westbrook superan temporadas de Jordan y Kobe, dos jugadores que se caracterizaron en algún momento, por dominar el balón.

Esa estadística no es positiva, pues para ganar en la NBA hay que ser efectivo, pero también compartir el balón. Hemos visto como en los pasados años los equipos poderosos han sido capaces de detener a Westbrook y a Harden en la postemporada. Ya en este punto, los equipos tienen mejor estudiados a los jugadores y sus tendencias y los árbitros permiten mayor contacto físico.

Ambos deben buscar mejorar su eficiencia

Harden se ha convertido en un lanzador de volumen, un jugador que anota mucho, pero que toma muchos intentos al canasto. El caso de Westbrook es parecido, para ser efectivo tiene que anotar o asistir en todas las posesiones, cosa que no funciona en postemporada. ambas estrellas deben encontrar la manera en que puedan dominar dentro del sistema y estando los dos a la vez en cancha. Conseguir ese punto donde pueden aportar al equipo sin tener que estar creando cada cosa que ocurre en el lado ofensivo de la cancha.

Westbrook ha bajado demasiado su eficiencia en las últimas campañas, al punto de ser considerado una de las estrellas menos eficientes en la historia de la liga. Su tiro de tres puntos ha bajado a porcientos históricos y lo peor es que lo sigue lanzando y ataca menos el canasto. Su fuerte era su ataque al canasto y su tiro a media distancia y hemos visto como en los pasados años ha sacrificado esas áreas de juego y ha bajado su rendimiento. Sigue poniendo estadísticas de triple-doble, pero a costa del mejor funcionamiento de su equipo.

En el caso de Harden, el barbudo sigue poniendo números históricos en un sistema de D’Antoni que se presta para eso. Un sistema abierto que invita a lanzar muchos triples y atacar el canasta, pero que no cree en el juego a media distancia. Harden es capaz de anotar de cualquier parte de la cancha y tiene una visión privilegiada. Probablemente, es el jugador más imparable de la liga, pero debe buscar la manera de lograr sus estadísticas dentro de un sistema colectivo.

¿Y qué significa esto?

Que no es necesario que anota o asista en cada posesión, que en ocasiones es bueno dejar que el equipo cree ofensiva como colectivo. Que el juego individual le ganará muchos juegos de temporada regular, porque no es fácil detenerlo, pero que ese estilo de juego de 1 vs. 1 no será efectivo contra equipos elites que tienen defensores elites del perímetro. Que entienda que el movimiento de balón es adecuado para que el ataque colectivo no sea tan predecible y que entienda que a largo plazo le conviene administrarse mejor para llegar más fresco a postemporada.

En fin, ambos tienen que entender que las estadísticas son buenas, pero de nada sirven si siguen eliminándose en postemporada. Que su momento llegó y que si no ganan en los próximos dos o tres años, no ganarán nunca.

Erik Spoelstra habla del potencial de los Rockets

Tuvimos un aparte con el dirigente del Heat previo al encuentro y se le pidió su opinión sobre a dupla de los Rockets y si hay alguien que sabe lo que es unir a dos super estrellas en el ‘pick’ de su carrera, es el coach del Heat de Miami, Erik Spoelstra. El dirigente tuvo la encomienda de unir a LeBron James, Dwyane Wade y Chris Bosh en el mismo equipo. Como bien explicó el dirigente, no fue un proceso fácil, mencionando que a ellos les tomó más de un años para encontrar el balance perfecto entre sus estrellas.

Es un proceso que toma tiempo, a nosotros nos tomó más de un año. Pero, al final del día necesitas talent para ganar en esta liga y los Rockets tienen dos estrellas a las que le pueden entregar el balón para que hagan que las cosas pasen en los momentos cruciales

Spoelstra sabe que los primeros meses de la temporada serán de mucho studio y entendimiento para Houston, pero también sabe que si logran quedar en la misma página, serán un dolor de la cabeza para el resto de la liga.

Excelente equipo, pero no para Campeonato

Los Rockets cuentan con uno de los equipos más talentosos de la NBA. Tienen dos MVP de liga, rodeados por excelentes piezas como P.J. Tucker, Clint Capela, Ryan Anderson, Eric Gordon, Austin Rivers y Tyson Chandler. El problema con los Rockets es que sus dos estrellas tienen un estilo de juego muy parecido y les tomará tiempo para encontrar la manera más efectiva de utilizarlos.

Al final del día, los Rockets necesitan que ambos sean efectivos estando juntos en cancha. Eso les puede tomar más de una temporada y debe haber una disposición genuina de uno de los dos jugadores de tomar el segundo puesto del equipo.

Solo puede haber un #1 y debe ser Harden. Su eficiencia y habilidad para anotar lo convierten en el mejor jugador de este equipo y en el líder. Llegó el momento para que Westbrook entienda que es el #2 del equipo y se comporte como al en cancha. A LeBron y Wade le tomó un año completo para que Wade decidiera que era el equipo de LeBron.

Estos Rockets ganarán muchos juegos solo por el talento que tienen. Pero, hasta que no logren jugar como unidad, no podrán adelantar profundos en la postemporada. Deben terminar la temporada regular entre los puestos 3 al 6 de la Conferencia del Oeste, podrían ser eliminados en una segunda ronda de postemporada.

Gracias por la lectura.

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